Un esfuerzo sobrehumano ha hecho la Universidad de Michigan
State, sin mucha estatura, sin haber comenzado bien la temporada y sin
expectativas de la crítica periodística de que pudiera repetir una vez más un
Final Four de la mano de Tom Izzo, otro de los monstruos sagrados que estará
presente en este torneo.
A su frente tendrá a Mike K, el coach de la Universidad de
Duke que armó el milagro a partir de su reclutamiento y así sumó a Jalhil
Okafor, casi seguramente el pick nº 1 del draft 2015 de la NBA. Pero también
sumó al chiquito endemoniado Tyus Jones y Justise Winslow (foto). Así Duke es el único equipo de la NCAA que tiene
tres fresman (debutantes) que golean en doble figura para su equipo.
Pero además completa su equipo inicial con el junior Marshall Plumlee, el último de los hermanos que también es enorme y mide 2,15 además de lo que pesa. Pero sobre todo juega bien de bien. Se le suma un sólida guardia de último año, Quinn Cook, de último año universitario, bien aliado a coach K para llevar adelante sus planes en el campo.
No me detengo mucho en este partido porque el propio record de los equipos muestra la disparidad existente entre estos dos. De todas formas hay que jugar, aunque se me ocurre que está claramente para que Duke gane con cierta comodidad este juego que va a primera hora, a las 7 y 10 de nuestro país.
Una gran parada se juega la Universidad de Wisconsin, de gran trabajo en la temporada de la NCAA, luego de que la pasada temporada también accediera al Final Four de la mano de su coach Bo Ryan, uno de los más ganadores de la historia de la NCAA. Coach Ryan hace 14 años que está en su cargo en esta universidad (31 años como head coach de NCAA) y ha mejorado el programa de básquetbol en forma sustancial, hasta el punto de repetir dos ingresos entre los cuatro mejores este año y el que pasó. Desde el año 2000 que los Badgers no lograban el acceso a estas instancias y se logró ganando más de 30 partidos por tercera vez en la historia de la universidad, cuarta en esta temporada 2014/2015 en que estableció un record de 35 ganados y tan solo 3 perdidos. Es además un ex profesor de High School que asigna gran importancia al desempeño curricular de sus jugadores, logrando de las mejores evaluaciones en ese sentido en cuanto a resultados logrados por los jóvenes estudiantes.
La estrella del equipo es #44 Fran Kaminsky, un jugador de 2.14 mts de altura, con gran inteligencia para jugar, además de una mano tremenda que le permite ostentar un 42% de acierto en triples esta temporada. Es el único jugador de una Universidad de las llamadas Majors, que lidera a su equipo en promedio de puntos (18), rebotes (8), asistencias, robos y tapas. Estilizado, un gran proyecto NBA que seguramente será uno de los mejores ala pivots de la competencia. Aquí reparte el esfuerzo para defender a los centros rivales con #15 Sam Dekker, jugador corpulento de 2.07 mts que tiene una mayor fortaleza que Kaminsky aunque es muy ràpido para su juego en la llave y también puede jugar de frente gracias a su manejo y potencia desde el pique. Su promedio de goles es de 13 por partido.
Este equipo deberá enfrentar nada menos que a la Universidad de Kentucky, la vencedora de este mismo cruce el año pasado, a la postre ganadora del título y a la que se le fueron todos sus principales figuras para el basquetbol profesional. Sin embargo el prestigio de reclutador de John Calipari, coach ganador con jugadores de primer año, ha formado otro equipo formidable y hasta ahora imbatido en la temporada. Es un hito más que busca marcar Kentucky y realmente tiene material para hacerlo, a pesar de que apenas ganó por un doble de atrás a Notre Dame en el cruce que lo trajo a semifinales.
Su fortaleza son los jugadores que ya suenan en los primeros picks del draft NBA.
El #12 Karl Anthony Towns es un gran jugador de 2.11 de estatura pero con 7 kgs más de peso que Kaminsky. Viene de convertir 25 puntos ante Notre Dame y es un jugador más fuerte aunque más interior en su búsqueda que los oponentes. Este pivot de nacionalidad dominicano será un gran defensor para sortear y además de su enorme capacidad de rebotes, destacando incluso en la ofensiva. Su compañero adentro es Willie Cauley-Stein, un gigante de 2,15 mts de altura, que no es muy fuerte pero sí muy ágil, sorprendente para su físico. Sus goles son en tránsito y es el jugador con más hundidas en toda la nación norteamericana esta temporada, sin embargo no tiene mucho juego de espaldas y su especialidad es la defensa intensa y el rebote.
Por acá nos quedamos en el análisis de los grandes de ambos equipos porque creemos que serán las luchas determinantes. Ojo que los perimetrales son también soñados jugadores y van a dar que hablar. No se pierdan el espectáculo.